Misión Semana Santa en Los Llanos de Casanare.

abril 06, 2015

La alegría es un signo de que el evangelio ha sido anunciado. (Papa Francisco)

En la semana del 27 de marzo al 4 de abril, con nuestras hermanas Olga Lucia Pérez, Evangelina, Sandra Escobar, Rosario Fernández, Francisca Malveira y Agustina Rodríguez, hemos vivido por gracia de Dios una experiencia única en Semana Santa.

En un principio, nuestro primer destino fue Yopal en donde fuimos a conocer el hospital antiguo de la ciudad, lugar donde nuestras hermanas viven por el trabajo pastoral que ahí mismo realizan. Las hermanas nos recibieron con mucha alegría y pudimos compartir un momento de fraternidad junto a ellas. El sábado 28 por la mañana nos reunimos para organizar el material pastoral con el cual íbamos a trabajar y después dividimos las parejas que iban a misionar en las diferentes veredas de los llanos. Por la tarde con gran alegría en nuestros corazones partimos rumbo al destino de misión, estábamos todas con una inmensa ganas de conocer el lugar en donde íbamos a convivir esa semana tan santa.

Y fue así que el bus que nos llevaba al destino comenzó su recorridos por la ruta con mucho calor, con el camino de tierra un poco desmejorado; pero la alegría que sentía nuestros corazones era tan grande que lo demás era trascendental. Entre charlas, bromas que nos hacíamos y disfrutar de algunas cosas sabrosas, llegamos al destino llamado los algarrobos el pueblo en donde quedaron las hermanas Olga Lucia Pérez, Rosario Fernández, Sandra Escobar y Francisca Malveira, lugar en donde el Párroco las esperaba para indicar los lugares de misión. Mientras que la hermana Evangelina y Agustina continuaron viaje al destino de misión: la vereda Los Claveres en donde iban a misionar.

El domingo 29 por la mañana las hermanas Olga Lucia Pérez y Francisca Malveira, salieron a la vereda llamada Carrizales. Las hermanas Rosario Fernández y Sandra Escobar, salieron a la vereda Colonia destino de misión. El trabajo realizado durante la semana fue las visitas a las familias, el rezo del Rosario, los encuentros con los niños, jóvenes y adultos. Como también las celebraciones correspondientes a la Semana Santa. (jueves Santo La última cena y el lavatorio de los pies, Viernes Santo procesión del Santo Viacrucis, sábado Santo realizamos la vigilia pascual).
Como también el conocer la realidad de cada comunidad y compartir la vida desde la simplicidad de ser presencia cercana y acogedora durante esos días junto a nuestros hermanos, que nos han recibido en sus casas con tanto cariño y atenciones para con cada una de nosotras. Muy agradecidas por cada momento compartido y por la apertura de ellos de participar en cada una de las actividades que les ofrecíamos. Agradecer a las familias que con tanta dedicación nos han brindado sus casas para alojarnos durante esos días, por cada uno de los detalles para hacernos sentir partes de sus familias. También agradecida al Párroco Fidel que nos hizo la invitación de trabajar en ese gran campo de misión en los llanos. Agradecer a nuestra congregación de Misioneras Agustinas Recoletas que nos han brindado esta oportunidad de poder vivir esta nueva experiencia de misión. Y agradecerle una vez más al Dios de la vida por habernos hecho este inmenso regalo de haber podido vivir una semana Santa haciéndonos pobre entre los pobres.